Sin duda, una dentadura postiza no solo aumenta nuestra calidad de vida sino que puede suponer un paso de gigante para nuestra autoestima. Pero, si esto es cierto, no lo es menos que el proceso de adaptación requiere paciencia y seguir unas sencillas pautas de manipulación y limpieza. Si eres novato en estas lides, presta mucha atención a los siguientes conejos que seguro te serán muy útiles. Comenzaremos por el principio:
Colocación
El primer paso para comenzar tu primer día con dentadura postiza es colocártela. Para hacerlo de forma correcta solo tienes que seguir estos pasos:
Prepara tu boca con una limpieza a fondo.
Para asegurar la sujeción, existen cremas o tiras adhesivas especiales (utilizarás la recomendada por tu odontólogo) que deberás aplicar sobre una dentadura postiza completamente seca y perfectamente limpia.
También es fundamental que extremes la limpieza de tus manos, pues colocarás la prótesis con tus dedos sobre las encías.
Por último, es muy importante que la primera mordida sea extremadamente suave, para asegurar que la prótesis se fija en su sitio pues, si se muerde con demasiada fuerza, la dentadura podría partirse o herir las encías.
Cuidados de la dentadura postiza
Si ya tenemos claro cómo colocarnos la dentadura, los cuidados y limpieza son otra parte fundamental para conseguir mantener tu sonrisa intacta, sin manchas y en perfecto estado. Para una perfecta conservación de tu dentadura postiza no debes de saltarte ninguno de los siguientes pasos:
Extrae y lava la dentadura después de comer. Para evitar caídas y/o roturas de la prótesis, antes de quitarte la dentadura coloca una toalla sobre la encimera o el lavabo o llena éste con un poco de agua. Después, enjuaga la dentadura con agua, asegurándote de que eliminas los restos de comida y pequeñas partículas que se hayan podido quedar entre las piezas.
La delicadeza debe ser la máxima en los cuidados de tu dentadura. Manipúlala con mucho cuidado para no doblar ni dañar el plástico o los soportes.
Limpieza bucal. Después de quitarte la dentadura, utiliza un cepillo de cerdas suaves para tus dientes naturales y una gasa o un cepillo de dientes suave para limpiarte la lengua, las mejillas y el paladar. En caso de que utilices adhesivo para la prótesis, asegúrate de que retiras todos los restos que hayan quedado en tus encías.
Al igual que los dientes naturales, hay que cepillar minuciosamente la dentadura postiza para eliminar alimentos, placa dental y otros depósitos y evitar así la aparición de manchas. Al menos una vez al día deberás remojar y cepillar la prótesis con un cepillo de cerdas suaves y un limpiador no abrasivo para dentaduras postizas. Si utilizas adhesivo, limpia cuidadosamente los surcos que se ajustan contra las encías para quitar el adhesivo restante. El cepillado se puede complementar (nunca sustituir) con una limpieza de ultrasonidos (en el mercado existen diversos aparatos con este fin). Y muy importante: nunca utilices los limpiadores de tu dentadura postiza para higienizar el interior de tu boca.
La dentadura debe permanecer húmeda para que no pierda su forma. Por ello, es fundamental que la pongas en agua o en una solución para remojar prótesis dentales durante toda la noche. Si tienes dudas al respecto, lo mejor es que preguntes a tu dentista y sigas las indicaciones del fabricante respecto de las soluciones de limpieza y remojo.
Antes de colocártela de nuevo y muy especialmente si utilizas una solución para remojarla, es importante que enjuagues bien la dentadura. Las soluciones de limpieza de las prótesis contienen sustancias químicas que podrían causarte vómitos, dolor o quemaduras si las ingieres.
Productos a evitar
Agua caliente o hirviendo. Podría deformar la dentadura postiza.
Dentífricos blanqueadores o productos que contengan lejía, ya que podrían debilitar la prótesis o cambiar su color. Especialmente si tu dentadura tiene fijaciones metálicas, debes evitar soluciones que contengan cloro, pues este producto puede manchar y corroer el metal.
Productos abrasivos. Cepillos de cerdas duras, limpiadores fuertes o dentífricos ásperos son demasiado abrasivos y podrían dañar tu dentadura.
Si sigues estos sencillos consejos conservarás tu dentadura postiza como el primer día. Pero, si a pesar de ello, notas que la prótesis se afloja, se mueve o encaja mal, es fundamental que visites a tu odontólogo para que la ajuste. Y en cualquier caso, para garantizar que la prótesis cumple su función correctamente y permanece en su sitio, es esencial que cumplas con las visitas periódicas a tu dentista.
